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Las ramas tiritan. Las tiesas ramas crepitan.

PUNTO DE FUGA

Todo tiene un punto de fuga, el lugar desde donde el filo del tiempo retrae las imprecaciones de lo indecible, todo, si no yo, puede desvanecerse de un día a otro como un todo no verídico, virtuoso por lo potencial, lábil por lo posible, y en ese orden, o en ese germen de caos, cada uno de los canales de la piel sellada en negro, puede interferir en otros como caminos que nunca se cruzan en un mismo nivel, pero se saltean entre sí, diminutos e intercambiables, como la voluntad, como el deseo, como la intención empedrada de libidinales o de huecos, caminos, vasijas, intersticios, comandos, retribuciones, precios, medidas, escozores, saber que cada cosa, en un principio, se diluye en un acaso, saber que, en tanto la luz del sol se derrame burbujeante por entre el aire de nuestra carne, nada tendrá en concreto nuestra garra sino lo difuso, el vaho de aquello desvaneciéndose, el contoneo de un aria penetrando al goce un porqué igual a la trepidación de taladro cualquiera neumático en el tímpano, cubierto de sangre, saliva, o polen auricular o todo es punto abre se ceba ingiere se desplaza ejecuta brota axioma ama degusta en cierta dimensión de la hierba salvaje el encono de no saberse sólido ni violento ni desairado o ajeno ya cerca del triunfo o de la meta o de la superación o el salto conocer la fibra del pulgar súbito un rasguño pie contra arista que propicia la debacle la pausa el candor de una derrota inminente convertida en alimento de la resistencia o por lo menos visto desde lejos en supervivencia de lo que se hace y deshace y desase y así en un ritmo vaivén en una nada nunca saber no detenerse no conocer la antimarcha ni la espera ni la paciencia pero vegetar inane porque la tormenta del mundo devana hilvana ovilla derrite solidifica sedimenta resquebraja respira extrae revive da vida viola golpea y mata para alimento de los cobardes que no reconocen aún en la fibra de las garras un arma en las hebras de la cabeza un arma en el golpe de los destierros una flor que emana incipia emerge exhala inhala sumerge remana acaba y nace no en la vía única sino en la que múltiple distribuye la voz de cada historia en cada verbo en cada sílaba en cada pronunciada mala especie larva endemia germen herida inquietud quiebre exponencial y palabra palabra palabra

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